Tuesday, October 21, 2008

Y sigo...


No debo establecer diferencias entre la soledad y la compañía, ambas son lo mismo percibido de manera diferente.

Nunca estoy sola, ya que siempre estoy con gente a mi alrededor, a unos pocos metros de distancia o a miles de kilómetros, en el mismo salón o en el mismo planeta.

Pero al mismo tiempo siempre estoy solo, porque nunca ninguna persona llega a fusionarse con mi ser.

Estoy con todos y al mismo tiempo estoy con nadie, ya que soy parte del "todo", pero por mas que interactúe con alguien e influyamos uno sobre el otro, siempre seremos seres individuales, en ningun momento uno se adherirá al otro.

Cuando me aflija por la soledad en la cual me encuentro, pensarè que siempre cuento con la presencia de mí mismo. Debo valorar mi propia compañía antes de recibir la de otros, para así no perderme por encontrar a alguien.

Caminarè conmigo a travès de mi soledad, que en realidad es compañía, y cuando me encuentre acompañado recordarè que siempre estoy solo.

No volvere a confundir compañía con cercanía y mucho menos con felicidad, porque cometería el gran error de ver la soledad como sinónimo de tristeza.

Dejarè de considerar la compañía y la soledad como un objetivo o algo a evitar, sino como momentos que la vida me ofrece; con la misma disposición que acepte uno, aceptarè el otro. De esa manera, nadie me engañará brindandome falsa compañía.

Hay momentos para estar solo, y momentos para estar acompañado, nada más, y ninguna situación es mejor que la otra.

"Nadie vino para quedarse eternamente... quien llega, en algún momento tendrá que partir."

Tomado del Libro: Extrañando a Dina de Mario Alonso Madrigal

(leer este libro, me ha servido para entender y encontrar respuesta a muchas interrogantes que tenia en la vida)

No comments: